La arquitectura especial del tetraedro combina funcionalidad con un toque de aventura. Para llegar a la primera plataforma, una escalera flotante lleva a los visitantes a 18 metros de altura. Para los que buscan aventura, hay un tramo más relajado, a 20 metros más arriba. Aquí te espera la siguiente plataforma con una espectacular vista panorámica de la región metropolitana. Y si esto no es lo suficientemente emocionante para ti, puedes aventurarte en la plataforma superior, ligeramente inclinada. Un lugar que traspasa los límites: una visita obligada para todos aquellos amantes de las emociones fuertes.
El Tetraedro no sólo impresiona por su arquitectura, sino que también es un destino popular por la noche, cuando está iluminado por el espectáculo de luces de Jürgen LIT Fischer. Esta vista mágica se puede explorar en un tranquilo paseo por los jardines, que son totalmente aptos para cochecitos. La entrada es gratuita, así que no hay excusas: definitivamente es un lugar que inspira un sentido de aventura.
Esta sorprendente estructura, una visita obligada para la comunidad de transeúntes que viajan por la A42, impresiona tanto al espíritu creativo como al explorador urbano. Independientemente del tiempo que haga, la vista panorámica sobre el corazón de la región del Ruhr permite que la realidad se desvanezca por un momento y te transporte a nuevas dimensiones. ¿Quizás incluso veas la Arena del Schalke? ¿O algo completamente diferente?